El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha anunciado que todos los presos que cuenten con experiencia militar van a ser liberados para unirse a las fuerzas de resistencia ante la invasión que está llevando a cabo el ejército ruso. «Cualquiera que pueda unirse a la lucha contra los ocupantes debe hacerlo. La decisión no fue fácil, desde un punto de vista moral, pero útil desde el punto de vista de nuestra protección» explica el mandatario en declaraciones recogidas por RTVE.
«Cuando me postulé para presidente, dije que cada uno de nosotros es un presidente. Porque todos somos responsables de nuestro estado, por nuestra hermosa Ucrania, y ahora cada uno de nosotros se ha convertido en un combatiente», añade Zelenski, quien llegó a la presidencia del país en 2o19 prometiendo acabar con la corrupción y la guerra y cuya popularidad había caído a mínimos antes del comienzo de la invasión por parte del régimen de Vladímir Putin.
La liberación de presos con experiencia militar ha puesto encima de la mesa un caso que fue muy polémico en el país, la detención en 2016 de guerrilleros que luchaban del lado ucraniano contra los separatistas rusos del Donbass por poseer en sus teléfonos móviles vídeos de pornografía infantil que incluían violaciones a bebés, tal y como recogía el medio español ABC.
«Cuando fueron detenidos los comandantes de Tornado, se les incautó los teléfonos móviles. En ellos había algunos videos que realmente daban miedo, con orgías y violaciones», explicaba la diputada y activista Tatyana Chronovol en una entrevista.
«Había incluso bebés. Supongo que las madres de esos bebés fueron forzados a hacer esto bajo la amenaza de muerte de sus hijos», añadía la diputada que fue una de las activistas que lideró la revolución de 2014 contra el presidente pro-ruso Viktor Yanucovich.
En total, entonces fueron detenidos y juzgados ocho miembros de la unidad tornado. Un grupo de guerrilleros ultranacionalistas creado en octubre de 2014 por el Ministerio del Interior de Ucrania para combatir contra los rebeldes de la región de Donbass, que a su vez recibían apoyo ruso. En los videos de estos psicópatas que ahora son puestos en libertad por el gobierno ucraniano «había también violaciones a chicas menores de edad» según explicaba esta diputada, que insistimos no es para nada sospechosa de permanecer al aparato de propaganda de Moscú y cuyo marido militó y murió luchando en el batallón de Azov, formado por neonazis.
El grupo Tornado fue creado además por el Ministerio del Interior ucraniano con la intención de sustituir a un batallón previo, el de Shakhtersk, que fue acusado de protagonizar saqueos sistemáticos.
Pese a que Ucrania incluyó reformas legislativas para tratar de convertirse en una democracia plena, lo cierto es que todavía está muy lejos de eso. Según describe la organización de derechos humanos Freedom House, con sede en Washington y de nuevo nada sospechosa de ser pro-rusa, «la corrupción sigue siendo endémica y las iniciativas para combatirla solo se aplican parcialmente».
Además, «los ataques contra periodistas, activistas de la sociedad civil y miembros de grupos minoritarios son frecuentes, y las respuestas policiales suelen ser inadecuadas».
Pese a esto, el presidente ucraniano Volodímir Zelenski ha solicitado a la Unión Europea su adhesión urgente al grupo comunitario y los 27 países estudian acortar el proceso para llevar a cabo la iniciativa que costó a España prácticamente una década de reformas estructurales.
Fuente: Digital Sevilla